La Fundación Bobath, en colaboración con un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid, están desarrollando una aplicación destinada a fomentar el aprendizaje de la expresión facial y de las emociones en niños con Parálisis Cerebral. El proyecto se llama EMO, y está dirigido a niños de hasta 10 años que tengan parálisis cerebral, problemas motrices severos y sin lenguaje o con dificultades para reconocer y expresar emociones de acuerdo con el mensaje que quieran comunicar.
La aplicación incluye una tecnología denominada de "los agentes
conversacionales personificados" (en inglés Embodied Conversational
Agents o ECAs), una figura animada de apariencia humana y
que puede comunicarse con una persona, de incluyendo gestos y
capacidades expresivas y sociales, de gran valor en la educación
especial. El objetivo es que el niño imite las expresiones que ve en este ECA y se vea reflejado en la pantalla realizándolas gracias a una webcam.
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